Entre los síntomas que desarrolla un individuo con desorden de bipolaridad también se encuentra la inflamación y desregulación del sistema inmune. Según Gabriel R. Fries, Consuelo Walss-Bass, Moises E. Bauer, Antonio L. Teixeira en el artículo “Revisiting inflammation in bipolar disorder” se observa desarrollo de enfermedades autoinmunes mas frecuente. Esto incluye hipertiroidismo, artritis reumatoidea y polimialgia reumática. Además, infecciones crónicas como Toxoplasma gondii y citomegalovirus se han visto asociados a mayor riesgo de desarrollo de desorden de bipolaridad. En fin, se ha observado clínicamente asociación entre desorden de bipolaridad y condiciones relacionadas a inflamación, pero no se ha determinado causalidad. Esto se ha evidenciado porque estudios han demostrado consistentemente que pacientes de Bipolaridad demuestran niveles elevados de citoquinas proinflamatorias e interleucinas en especial durante episodios de ánimo agudos.
Segundo tema II. Bipolaridad a nivel neurobiológico
-Es importante tomar en cuenta que los cambios en comportamiento que son vistos en enfermedades mentales pueden atribuirse a cambios neurológicos del individuo afectado. En el caso de la bipolaridad, según DP Hibar y sus colegas en el articulo “Subcortical volumetric abnormalities in bipolar disorder”, se puede determinar por estudios comparativos que los pacientes de bipolaridad demuestran diminución significativa de volumen bilateral en el hipocampo, demostraron también volumen significativamente mayor en los ventrículos laterales. En este estudio se determino que hay una disminución en volumen de hipocampo que decrece mientras aumenta edad, pero no hay diferencia significativa en cambios neurológicos y sexo.
-Otro aspecto neurológico que está bajo estudio, presentado por Paul J. Harrison y sus colegas en el artículo “The emerging Neurobiology of Bipolar Disorder”, es la desregulación en señalización de Calcio en pacientes de desorden de Bipolaridad. Nos indican que se perciben aumentos en mediciones intracelulares de calcio en pacientes de Bipolaridad en especial cuando son estimulados. Se considera que estos cambios de señales son por cambios genéticos y parcialmente causales haciendo de interés genes asociados a canales de calcio al igual que canales gatillados de calcio.
Como tercer tema III. Medicamentos para bipolaridad
-De acuerdo con Francisco Lopez-Munoz y sus colegas en el artículo, “A history of Pharmacological Treatments of Bipolar Disorder” podemos determinar que se introdujeron las primeras drogas para el tratado de maniacos durante la primera mitad del siglo 20, entre estos resaltaron los barbitúricos. Luego para los años 1950 se confirmó la eficacia anti maniaca de sales de litio hasta que finalmente en los 1960 se demostró que litio, también con efectos anti-suicidas significativos, era un profiláctico efectivo para episodios maniacodepresivos de el desorden de bipolaridad. Fue entonces para los 1970 que se aprobó este medicamento como indicativo anti maniaco por la “Food and Drug Administration” (FDA). 20 años más tarde se aprobó por la FDA acido valproico, anticonvulsivante, y en paralelo a esta carbamazepina, medicamento antiepiléptico fue desarrollado para el tratado del desorden de bipolaridad. Finalmente, en el 2000 se aprueban diferentes antipsicóticos atípicos por indicativos anti maniacos o antidepresivos, entre estos: olanzapine, risperidone, quetiapine, ziprasidone. Esto ha resultado en un tratado complejo para el desorden de bipolaridad donde combinar drogas en un sentido poli fármaco se ha vuelto la norma en vez de la excepción debido a las diferentes fases que conlleva la condición.
-De los tratamientos antes mencionados solo unos pocos tienen el respaldo de tratamiento a largo plazo. Estos incluyen sales de litio, antidepresivos, algunos anticonvulsivantes y drogas antipsicóticas de segunda generación. Esto se debe a que estas son las drogas que demuestran valores estadísticos significantes por su efectividad. En otros casos, drogas antipsicóticas de primera generación pueden ser utilizadas de manera corto plazo para episodios agudos de manía pero pocas veces se utilizan a largo plazo. Además, otra alternativa a corto plazo es la terapia electroconvulsiva cual demuestra eficacia y seguridad con estabilidad prolongada luego de tratamiento.
-Finalmente el uso de drogas con enfoque antinflamatorio también puede ser utilizada para pacientes de desorden de bipolaridad. Según Joshua D. Rosenblat en su articulo “Targeting the Immune system in the treatment of bipolar disorder” drogas como N-acetylcysteine (NAC), pioglitazone, minocycline, and coenzyme Q10 han demostrado eficacia antiinflamatoria y han logrado efectos antidepresivos prometedores en estos pacientes. Sin embargo, se debe continuar el estudio de estos medicamentos debido a que su efectividad es susceptiva a etapas de la condición.
Como cuarto tema tenemos IV. Mejora en calidad de vida para pacientes de Bipolaridad
-Según Caterina del Mar Bonnin y sus colegas en el articulo “Improving Functioning, Quality of life, and Well-being in Patients With Bipolar Disorder” se nos presenta la estadística que 1 de 3 pacientes de bipolaridad recupera funcionamiento psicosocial 1 año luego de seguimiento terapéutico indicándonos que desde el principio hay un impedimento para los pacientes de bipolaridad. Estos autores presentan en su artículo que hay múltiples variables influyentes en el recuperamiento de los pacientes con desorden de bipolaridad, entre estos se demuestra que pacientes masculinos y mayores demuestran menos resultados funcionales luego de terapia; estar casado influye como protección a impedimento funcional. Por otro lado, se presenta que estatus socioeconómico mayor aumenta resultados funcionales. Variables clínicas como calidad de sueño, densidad de episodios, uso de sustancias y desordenes de personalidad se ven negativamente relacionados a la funcionalidad de estos individuos. El mejoramiento funcional de esta condición se alcanza utilizando: terapias farmacológicas y terapias psicológicas individuales o en conjunto. Sin embargo, se debe prevenir el delineamiento funcional una vez en tratamiento. Para esto los autores indican que es importante atender síntomas debajo del umbral de depresión debido a que en conjunto con impedimento cognitivo forman un predictor fuerte de funcionalidad. Además, mejoramiento de reserva cognitiva sirve como prevención de delineamiento funcional porque permite que se endure la neuropatología, minimizando manifestaciones u permite el cumplimiento de tareas cognitivas. Por último, dieta y ejercicio proveen un rol critico en el recuperamiento de los pacientes.
Como quinto y último tema V. Tratamiento innovadores
-Leyendo el artículo “Innovative approaches to bipolar disorder and its tratments” de Paul J. Harrison y sus colegas tomamos en cuenta que el pilar terapéutico para las tres fases de el desorden bipolar es farmacológico. El tratado a base de evidencia ha demostrado que lamotrigina y quetiapina tiene mas efecto que quetiapina sola abriendo puertas a combinación de medicamentos con efectos sinérgicos. Se establece que Litio es la monoterapia mas efectiva para la prevención de relapso en el desorden de bipolaridad, pero su eficacia es balanceada por los efectos adversos y su toxicidad; entre estos fallo renal, potencial de daño en mujeres embarazadas o lactando y otros. El futuro del desarrollo para tratamiento de bipolaridad demuestra promesa y se debe al crecimiento de desarrollo tecnológico que podría llegar a permitir la conceptualización del fenotipo de desorden de bipolaridad a nivel genético. Adicionalmente, terapia por medio de genética está en estudio permitiendo la utilización de modelos celulares y de ratones facilitan también el descubrimiento de medicamentos efectivos para nuevos tratamientos. Entre los enfoques de efectos fisiológicos del desorden bipolar por el que se pueden encontrar nuevos tratamientos encontramos: medicamentos efectuando en los canales de calcio, medicamentos dirigidos a la inflamación y medicamentos que lleven a la normalización de los cambios neurológicos que sufren estos pacientes.
-El desorden de bipolaridad es un desorden crónico con fluctuaciones en estado de ánimo y energía. Se ha encontrado que los pacientes de desorden de bipolaridad I y II demuestran cambios neurológicos identificados como: una disminución en volúmenes bilaterales del hipocampo, tálamo y en amígdala; además se encontró relacionado a esta condición que surja un aumento en volumen de ventrículos laterales. Por otro lado, se ha investigado históricamente como métodos de tratamiento farmacológico el uso de: barbitúricos, alcaloides, bromados, litio, antiepilépticos y agentes antipsicóticos. De estos, litio ha demostrado evidencia de tener efectos anti-suicidas en estos pacientes. La calidad de vida es un aspecto multifactorial que influye en el mejoramiento de estos pacientes por medio de intervención profesional. Finalmente, entre los métodos innovadores para el tratado del desorden de bipolaridad podemos encontrar la terapia del desorden de bipolaridad por medio de genética, el uso de medicamentos dirigidos al sistema inmune para atender los aspectos inflamatorios de este desorden y nuevas combinaciones de medicamentos que lleven a resultados deseados.