Podcast 28

Title: ADHD: a Pharmacological and Non-pharmacological Approach

By Sandra Cuevas


Sandra Cuevas Rodríguez

University of Puerto Rico, Rio Piedras Campus
Faculty: Natural Science
Baccalaureate: Molecular Cell Biology
Year: 5th


Transcript (spanish)

Hablemos sobre Attention Deficit and Hyperactivty Disorder, ADHD, como la mayoría de nosotros lo conocemos. Es un término muchas veces usado a la ligera para describir un comportamiento, tal como dice la palabra, hiperactivo. Es una de esas palabras que se usan coloquialmente, como si fuese un adjetivo, y al usarlas de tal manera se les quita el peso a lo que significa tener un desorden mental. Es verdad que muchos pacientes diagnosticados con ADHD, especialmente los jóvenes y adolescentes, muestran comportamientos impulsivos, hiperactivos y algunas veces de enojo. Pero de ahí a estar diagnosticado con un desorden mental hay una diferencia significativamente grande.

Muchas veces, y no debo ser la única que ha escuchado comentarios como estos, he visto a padres y madres diciendo que su hijo o su hija tiene ADHD porque no se esta quieto, siempre tiene energía y quiere jugar, y algunas veces tiene berrinches. Si es cierto que muchos niños con ADHD muestran este tipo de comportamiento de manera constante y repetitiva, pero el proceso de diagnóstico de un desorden mental es uno largo y tedioso, y no se deben usar términos de salud mental como adjetivos, porque de tal manera, aislamos a estas personas que si están manejando un diagnóstico y que a la vez están sufriendo esa estigmatización que surge principalmente por una falta de conocimiento sobre los temas.

Así que abro debate para hablar sobre lo que es el ADHD. ¿Qué es? Bueno, sabemos que es un desorden de neurodesarrollo que mayormente se presenta a una temprana edad, pero no se limita a ello. Muchos adultos también son diagnosticados con ADHD.

Para niños y adolescentes, la prevalencia es de 5% a nivel mundial, y para adultos es de 2.5%. además, se presenta mucho mas frecuentemente en hombres que en mujeres, con una proporción de 2 a 1, mientras que la proporción que existe entre niños y niñas es de 1.6:1.

Dentro de lo que viene siendo ADHD y desórdenes mentales, encontramos que también hay categorías. En el ADHD hay tres tipos. El ADHD tipo I viene siendo el de inatención, pero excluyendo hiperactividad. En este caso, algunos de los síntomas que pueden presentar estos pacientes son dificultad prestando atención, dificultad siguiendo direcciones, comportamiento tímido o retirado, fácilmente distraído, un poco lento en el

procesamiento de información y desorganizado o descuidado con uno mismo. Por otra parte, en el ADHD tipo II lo que se presenta es una hiperactividad predominante pero sin inatención. En este caso, los pacientes se caracterizan por mostrar inquietud, acciones y palabras impulsivas, hablar excesivamente, muestran un temperamento impaciente, e hiperactividad. Por último está el ADHD tipo III. Esto lo que viene siendo es una combinación de las anteriores dos mencionadas. Es una combinación de todos estos síntomas de inatención y de hiperactividad. Sin embargo, en los tres casos, para dar con un diagnostico el paciente tienen que estar en observación y presentar estos síntomas durante seis meses.

Muy importante recalcar que esta es uno de esos desordenes que se desconoce su causa, aunque se sospecha que debe existir un factor genético muy grande. Pero si existen ciertos factores de riesgo, como daño cerebral o el uso de alcohol y tabaco durante el embarazo.

Aunque no se conozca su causa, hay muchas maneras de tratar este desorden mental. Dependiendo de la edad del paciente se recomienda utilizar medicamentos o terapia sobre manejo de comportamiento o una combinación de ambas. En el caso de niños menores de 6 años, la recomendación es terapia antes de medicación. Y para niños mayores de 6 años se recomienda que sea una combinación entre medicamentos y terapia.

En cuanto a los medicamentos, la mayoría de ellos son agonistas de los pathways de catecolaminas, y lo que hacen es aumentar la dopamina y norepinefrina en las sinapsis. Los más utilizados son los psicoestimulantes como el metilfenidato y la anfetamina, y estos vienen siendo los más efectivos. Por otra parte, la terapia conductual se utiliza para darle recursos al paciente y a su familia de como manejar sus emociones y sus reacciones ante ciertas situaciones y como reducir esos síntomas de ADHD sin el uso de medicamentos. Además, se incorporan ciertas terapias cognitivas para reducir los síntomas de ADHD y mejorar el overall desempeño de estos pacientes.

Sin embargo, la mayoría de estas terapias se utilizan en niños y jóvenes, ya que la expresión de ADHD en adultos viene siendo bastante diferente.